El artículo de hoy viene inspirado en uno de los temas que tocaré en un Taller in-house que estoy preparando para una de las organizaciones donde acompaño a equipos a lograr mejores resultados a través de una productividad integral.
¿Qué tiene que ver productividad con autoconocimiento?
Absolutamente, TODO! Tú eres tu activo más preciado y valioso y, de hecho, eres la persona con la que vas a pasar el resto de la vida que decidas crear para ti. Así que, a mi manera de ver las cosas, no deja de ser lógica la idea que, si queremos lograr más y mejor en esta vida, tenemos que ser más y mejor.
Cuando acompaño a los profesionales a crear un estilo de productividad que más se ajuste a ellas, a su lifestyle, por muy buen sistema de planificación y organización que elijan, si la mentalidad no les acompaña hacia ese mejor destino que quieren crear, éste se convertirá en el mayor bloqueo, muchas veces silencioso, para alcanzar lo que desean. ..y es que posiblemente los pensamientos no van de la mano con sus sueños; y como ya sabrás, estos pensamientos son el origen de emociones, creencias, actitudes y comportamientos que tenemos y que marcan nuestro día a día y los resultados que vamos obteniendo.
Así que si quieres mejorar en algo: tener mejores resultados, ser más eficiente, mejor organizado, más productiva, o cualquiera sea tu caso, tendrás que darte un tiempo de autoconocimiento, ¡eso sí! una reflexión enfocada y dirigida a obtener una mirada, un descubrimiento, una conclusión y por ende, a tomar una acción al respecto.
En este sentido, la mirada que te sugiero darle a tu trabajo de autoconocimiento en cuanto a tu productividad es:
- Haz una revisión de aquello que le da dirección a tu vida, lo que muchos llaman propósito o visión de vida, el término es lo de menos. Échale un vistazo qué es aquello que le da sentido a tus días, haciendo qué actividades te sientes más plena y viva. Quizás ayudando a los demás de alguna manera en particular, o creando ambientes armónicos en tu entorno, haciendo las cosas más funcionales para otros, etc. Fíjate que estos propósitos no son profesiones o carreras concretas, pero te darán una pincelada sobre el sentido y dirección que quieres darle a tus días. Por ejemplo desempeñarte en áreas relacionadas a la medicina, psicología, terapia, coaching etc cuando tu propósito se dirige a ayudar a otros. Identificar tu propósito te ayudará a tener la certeza que estás asignando tiempo y espacio a aquello que le da sentido y rumbo a tu vida.
- Presta más atención a tu diálogo interno, lo que te dices habitualmente, ¿son pensamientos destructivos? O más bien ¿son pensamientos que hacen que le pongas más ganas al día a día? Esto es súper importante y, a veces, pasa inadvertido; el impacto de los pensamientos sobre nuestro estado de ánimo y emociones impacta directamente sobre nuestra forma de actuar a diario, se convierten en patrones de comportamiento, y como consecuencia lógica, en los resultados que obtenemos en nuestros días. Si descubres que la mayor parte de tu tiempo te estás hablando negativamente, criticándote, juzgándote, entonces activa esa conciencia para cuando vuelva a pasar reviertas ese pensamiento en algo mejor, o simplemente al reconocer que ya lo hiciste, decirte algo más amable y hasta divertido.
- Date tiempo a mirar y aceptar los miedos que te rondan, ¿cuáles son? Fíjate si generalmente son los mismos, y si ellos llegan a paralizarte o los estás gestionando debidamente. ¿Qué impacto están teniendo esos miedos en tu vida?. Haciendo esto descubrirás qué miedos específicos se están interponiendo en alcanzar aquello que realmente quieres, y podrás hacer algo al respecto. Solemos estar enemistados de los miedos, pero realmente ellos están ahí con la intención de protegernos de algo; así que dale cara, habla con él, descubre su intención positiva y encuentren una mejor opción para reducir el riesgo del cual te quiere proteger, y así puedas seguir avanzando.
- ¿Y tus creencias?, te están empoderando hacia tus objetivos o más bien son un obstáculo que dificultan tu camino ¿Cuáles son aquellas que identificas como prioritarias a trabajar? ¿Qué nuevas creencias quieres agregar a tu mindset? Por otro lado apaláncate en aquellas creencias que ya tienes y que te empoderan, apóyate en ellas para andar con más constancia y ganas hacia tus objetivos.
- Revisa tus metas, proyectos, objetivos. ¿Están alineados a tus valores personales? Evita caer en la trampa de fijarte metas que no son tuyas, y estar trabajando en los sueños de otros, viviendo la vida de otros; la mejor manera de darte cuenta de esto es identificar esos valores que te hacen vibrar, los que son importantes para ti; lo he dicho antes, tus valores personales serán el combustible necesario para avanzar hacia lo que quieras agregar a tu vida.
- Identifica tus fortalezas, así como reconoce tus dones, habilidades, talentos; todos ellos serán tus aliados, te apoyarás en ellos para los proyectos que quieras concretar. Y definitivamente igual de importante, reconoce tus debilidades, porque no podemos tenerlo todo, verdad? así que más vale que le eches una mirada para evitar que se conviertan en obstáculos en tu camino, y te permitas buscar recursos y/o complementos para compensar esa debilidad.
También puedes darle un giro a tu trabajo de introspección y autoconocimiento, no es mi preferido, pero también funciona; identificando aquello en tu vida que NO está resonando contigo, en tu vida, o lo que no te está funcionando; partiendo de ahí, vas retrocediendo hasta encontrar ese origen, la raíz “putrefacta” que está impidiendo que broten los frutos que quieres. Por ejemplo si llevas tiempo en una meta y por alguna razón por más acción que le pongas no estás obteniendo resultados, ¿qué obstáculo descubres detrás? ¿es algún miedo, creencia, una habilidad que falta desarrollar? O ¿es que realmente esa meta no es tuya y no está alineada a lo que quieres experimentar? Tal vez no es nada de eso, y es que simplemente no te has dado el tiempo para tomar conciencia de lo importante que es esta meta para ti y para el legado que quieres dejar en tu vida…piénsalo!
En conclusión, aprender a escucharte, a conocerte, conocer tus limitaciones, lo que te potencia, tus fortalezas, identificar tus miedos “tus saboteadores silenciosos”, reconocer lo que te hace sentir viva y plena, lo que te da mayor satisfacción, son aspectos indispensables a tomar en cuenta en tu trabajo de introspección y autoconocimiento para aplicar una verdadera productividad integral a tu vida, enfocada en tus sueños, avanzando y logrando resultados.
Si aún no tienes contemplado un espacio de autoconocimiento en tu calendario semanal, te invito a que tu primera acción después de leerte este mensaje, sea dirigirte a ese calendario, crees un bloque de tiempo de al menos una hora en tu semana y te dediques a esa introspección; elije el día que más te convenga y el horario que más se ajuste a lo que actualmente ya vienes haciendo, hazlo simple para que no caigas en la trampilla de las excusas, ellas están ahí a la orden para sabotear tus sueños.
Y ya sabes, si tienes comentarios o dudas me encantaría escucharte…mejor dicho, leerte